“No hubo un acuerdo con el sector. Podrá haber, en parte de lo que anunció el Gobierno, un entendimiento con frigoríficos e hipermercados para ofrecer algunos cortes a determinado precio. Pero, en realidad, esta es una medida que tomó el Gobierno y que nosotros no compartimos para nada”, aseguró Dardo Chiesa, coordinador de la Mesa de las Carnes del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), en diálogo con Tranquera, tras la decisión del Ejecutivo nacional de mantener cerradas un 50% de las exportaciones de carne vacuna y prohibir los envíos al exterior de 7 cortes.
Al respecto, el dirigente indicó: “Tocar el mercado de la carne, para tratar de manejar los precios, ya dio malísimos resultados. Hoy, estamos viviendo las consecuencias de eso. Ahora, ya tenemos carne que no sabemos si se embarca, y con trabajadores que están en riesgo de ser despedidos. Estamos en un proceso de desintegración de la cadena, como ya lo vivimos en otra época. Esto no es bueno y seguimos trabajando para ver cómo salimos, ayudando al Gobierno a que se encuentre otra solución que no sea esta, porque hay otros mecanismos”.
En ese sentido, Chiesa, quien participó de las reuniones con los funcionarios nacionales para tratar de destrabar el conflicto, aseguró que, como “lo reconoció el presidente Alberto Fernández”, en Argentina se consumen entre 115 y 117 kilos per cápita por año, sumando los principales 4 tipos de carnes, sin contar al pescado. Un dato que, según él, debe tenerse en cuenta para buscar una solución.
“Eso nos coloca en el top de consumo junto con Australia y EEUU. Quiere decirse que no es un problema de hambre, de que falte carne en el plato de los argentinos porque no haya alimentos. Así como eligen los cortes vacunos, que son más caros como sucede en el resto del mundo, los argentinos también consumen pollo al mismo nivel, está creciendo mucho el cerdo, y se está tratando de avanzar con el ovino, que es una carne muy buena y tiene que encontrar un canal formal de comercialización, que es lo que está trabando su desarrollo”, explicó.
Por eso, al respecto, evaluó que debería apuntalarse a las carnes de esos otros animales, que tienen procesos de gestación y crianza más cortos que las vacas, mientras se desarrolla una mayor oferta bovina. “De esa manera, se potenciaría todo, generando inversión y empleo en todas las carnes. No como ahora, que se restringen las exportaciones, provocando desinversión, cierre de frigoríficos, desempleo, y caída del valor. Toda esa situación en el negocio ganadero vacuno, también impactará en el pollo y el cerdo, que tampoco podrán seguir creciendo y entrarán en un proceso de desinversión. Esto ya pasó, no es algo nuevo”, agregó.
Por otro lado, acerca del Plan Ganadero que el oficialismo pondrá en marcha, con posibles beneficios impositivos y crediticios para los productores, Chiesa comentó: “Nosotros, hace un año, con el Consejo Agroindustrial estamos elaborando un proyecto para promover las exportaciones. El Gobierno dice, que de lo que pedimos, está todo (en el plan). Pero no te puedo asegurar que sea así, porque no lo vi. No hay nada anunciado, hay simplemente títulos, y una intención de mostrar interés para que el sector se desarrolle. Aunque en un marco de restricción de exportaciones, podés tener el mejor plan del mundo que igual no va a funcionar”.
Las declaraciones de Chiesa a Tranquera se dieron minutos antes de participar en la reunión virtual, que pautaron hoy desde las 11.30 horas, el Consejo Agroindustrial con los ministros de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Basterra, y de Desarrollo Productivo, Matias Kulfas, como parte de la agenda de trabajo que la entidad tiene con los funcionarios nacionales y dónde se abordarían aspectos para la puesta en marcha de la mencionada iniciativa.
Por último, consultado sobre las quejas de la Comisión de Enlace referidas a que el Gobierno eligió como interlocutor solamente a algunos miembros del Consejo Agroindustrial y de los frigoríficos exportadores del Consorcio ABC, Chiesa afirmó: “Es un tema del cual yo no puedo opinar. La Mesa de Enlace, a la cual pertenecí (como dirigente de CRA), tiene sus tiempos y su agenda propia”.
