El próximo 10 de diciembre y los sucesivos días, acompañados de las medidas que se tomen, serán clave para empezar a conocer el rumbo de Argentina durante el mandato de Alberto Fernández. En este marco, un informe de la Fundación Mediterránea estima que el precio de la carne vacuna en el mercado interno argentino podría llegar a aumentar en caso de mantenerse las ventas al exterior, sobre todo a China, y no aumentar la producción del sector bovino nacional.
“En octubre se exportaron casi 96 mil toneladas de carne bovina (res con hueso equivalente), el volumen más alto en lo que va del año. Este flujo representa más del 30% de la producción mensual. Todo indica que los envíos seguirán creciendo y por ende que la importancia del sector externo se profundizará en 2020 de no haber intervenciones en el mercado”, afirma el economista Juan Manuel Garzón, quien elaboró el documento.
El foco del informe está puesto en el impacto que puede llegar a tener el boom de exportaciones sobre los precios internos de la hacienda y de la carne bovina en góndola en el próximo año.
“Si la producción de carne no crece la disponibilidad para el mercado interno se reducirá casi con seguridad, y la mayor competencia por el producto (ahora más escaso) exigirá un ajuste ascendente de precios para equilibrar el mercado, cuya intensidad dependerá de cuánta carne menos se vuelque al consumo, de cómo se encuentre la actividad económica en general y también de lo que puedan aportar las carnes sustitutas”, sostiene el documento.
Cabe destacar que desde la Federación de Industrias Frigoríficas de la República Argentina (FIFRA) prevén que faltará ganado bovino durante el verano, lo que impactaría en un alza en los precios. Fue el vicepresidente de la federación, Daniel Urcía, quien señaló que a fin de año la falta de hacienda podría producir un aumento de los precios del 40% y este incremento se trasladaría a los precios de la carne en las carnicerías.