La relación entre el Gobierno y el sector agropecuario se volvió más tensa este último mes a partir de la decisión de intervenir la empresa Vicentin. Pero eso no es todo, esta situación podría agudizarse mucho más aún si se concreta lo que algunos funcionarios públicos están planeando para que ingresen dólares al país: la idea es que los productores vendan los granos antes del 30 de septiembre, fecha en la que finaliza la campaña de este año.
Está en carpeta entonces la posibilidad de una resolución o decreto en la que se establezca que toda aquella persona que liquide sus exportaciones luego de que finalice la campaña, lo hará al precio con el que el dólar cerró el 30 de septiembre.
Se analiza la posibilidad de una especie de congelamiento del dólar para las exportaciones, y el precio quedaría fijado el 30 de septiembre
Desde el Gobierno reclaman que los productores guardan 12.500 millones de dólares en productos, y estos siguen sin estar de acuerdo con el alto porcentaje de retenciones fijado en el último tiempo.
Por otro lado, en el sector exportador dicen que se trata de 10.000 millones de dólares entre los 24 millones de toneladas de soja que no vendieron, junto a otra suma de maíz y trigo. Asimismo, aseguran que ya vendieron alrededor de 26 millones de toneladas de soja.
Un experto economista comentó que “si avanzan con esta medida sería una suerte de congelamiento cambiario, y eso solo puede llevar a dos cosas: más acopio por parte de los productores y, probablemente, menos siembra”. Además, agregó: “Porque siempre lo que genera este tipo de restricciones son retracciones de la oferta”.
Esta decisión será importante y, en caso de concretarse, seguramente tendrá un gran impacto en el sector agropecuario.
