El Gobierno Nacional, a tavés de su ministro de Economía, Martín Guzmán, anunció ayer un paquete de medidas orientadas a frenar el avance del dolar y a nutrir de reservas al Banco Central de la República Argentina.
Buena parte de ellas estuvieron dirigidas al agro. Así, se informó una reducción de los derechos de exportación del grano de soja del 33% al 30% en octubre, y un aumento progresivo en los meses de noviembre y diciembre para volver al 33% en enero.
No hubo finalmente anuncio alguno respecto de la carne. Si bien los trascendidos aseguraban que se efectuaría una baja del 9% al 5% en los derechos de exportación, la realidad es que esto no ocurrió.
Por otra parte, se anunció un plan de “compensación y estímulo para pequeños productores de soja por 11,500 millones de pesos”.
Sin embargo, los anuncios no tuvieron la recepción esperada por el Ejecutivo. El campo, practicamente en su totalidad, catalogó las medidas como “insuficiente”.
En principio señalan que la baja de retenciones por un sólo mes y sólo en 3 puntos deja un escenario practicamente igual al anterior, y no incentiva para nada al productor para liquidar divisas. Así lo expresó el influencer en redes BumperCrop1: “Pasé de vender la soja de 51,10$/USD a 53,30$/USD. Por un mes”.
El vicepresidente de CRA, Gabriel de Raedemaeker, fue más allá en su plantéo y aseguró que “las medidas anunciadas significan una nueva y brutal transferencia de recursos de productor hacia la industria y los exportadores”, y finalizó: “Nos toman por estúpidos”.
En efecto, el dirigente se refiere a la reducción a 0% en las retenciones a la industria de bienes finales industriales y del 3% para los insumos elaborados industriales.
La Mesa de Enlace, por su parte, emitió un comunicado en el que aseguran que las medidas “no abordan la problemática real de los productores agropecuarios” y que se “asemejan parches, pero no definen pasos a seguir ni son políticas integrales”.
“Una baja circunstancial y temporal de unos puntos de retenciones no resuelven ninguna situación. De hecho, sólo beneficia a algunos actores, que en particular no somos los productores agropecuarios. En rigor, estos anuncios están orientados más bien a una transferencia de los productores a otros sectores de la economía”, sostuvieron las autoriades del campo.
